Los intelectuales en la Edad Media

Evidentemente, Carta Abierta es un triunfo del pensamiento critico, por eso desde el progresismo blanco, pocas criticas y a veces “casi pidiendo permiso” se resbala algún comentario sobre el accionar de “carta”, y su posición critica, pero contemplativa sobre el gobierno. El portavos de la idea, de la razón universal, y del pensamiento peronista, Pino, no solos dice que Perón hoy no estaria en el Justicialismo, sino tambien que los intelectuales bla bla bla...

“—¿Qué piensa de los intelectuales del grupo Carta Abierta?

—Lo que está en discusión es si el gobierno kirchnerista es la alternativa progresista en la Argentina.

Después agraga:

—El Gobierno juega esa carta. Incluso hasta levanta a Jauretche y puede hablar de Scalabrini. La realidad es que ha sabido manipular. Y una de sus políticas más astutas ha sido penetrar casi todas las organizaciones políticas y sociales a canje de algún beneficio. Pero también a un sector del movimiento de derechos humanos. En esa repartija de poder, que tiene que ver con subsidios, con planes, con dineros para obras sociales, para construcción de viviendas o planes culturales o de cualquier naturaleza, el kirchnerismo ha construido con enorme habilidad un tejido de alianzas muy numeroso. Y ahí estamos en el juego de ficciones entre lo que es y lo que no es.

—¿Incluye a Carta Abierta en esa confusión?

—Hay que incluirlo.”

Otro que hace un comentario extraño, no tan critico como el de los “intelectuales del vino y el chori”, sino casi pidiendo permiso a lo "gatica", es Caparrós.

“Me tomé el trabajo de leer el último documento de Carta Abierta, la agrupación de intelectuales kirchneristas –porque respeto mucho a algunos de ellos, porque me interesa la discusión y porque recibió tantos comentarios peyorativos, tanto gorilismo antiintelectual en la página web de Crítica de la Argentina, que supuse que valdría la pena.”

El chimpancé se asusta del gorila,y arremete contra el mundo:

“Pero, más allá de ese detalle –y del tema de la utilización de la memoria–, debo decir que estoy de acuerdo con sus críticas –aceradas, acertadas– al gobierno. Ahí es donde se concreta mi pregunta: lo que no entiendo, entonces, es por qué lo apoyan con tanto fervor. No me alcanza que los otros sean peores. He buscado en su documento –de verdad he buscado– las razones, y no las encuentro. Quizá sea mi tontería, mi ingenuidad, mi cortedad de miras. Ojalá les interese contárnoslo. A mí me importa entenderlo.”

Caparros, apoyan críticamente al gobierno por pura convicción, en cambio vos sos crítico con sueldo fijo ¡papa!

Siguiendo el rastro de Carta abierta, encuentro en la Nación este texto esacruchante, pero de el solo voy a citar algunas bolufrases:

“Y en la protesta contra el abuso de poder, fiscal y, más tarde, físico, del gobierno y sus grupos de choque,”

“La presunción de que todavía es posible una "vía nacional al desarrollo" o la hipótesis de que el Estado puede administrar lo que ni siquiera supo controlar, ya fueron revisadas y abandonadas por la izquierda allí donde esa corriente tomó nota del estrepitoso fracaso de lo que se denominó el "socialismo real"”

“El temperamento reaccionario de esas cartas abiertas”

“La civilización alcanzó un estado, denominado "sociedad de la información"”

Evidentemente, Carta Abierta jode, y los argumentos bizantinos sobran.