"El despertar de la criada" Eduardo Sívori (1847-1918)
En mi pensar me repito
Y me repito en pensar.
Muy cruda es la soledad
A no perderse en el vicio.
Todo pensar es motivo
Pa seguir en la morada,
Como alma enamorada
De una hermosa mujer,
Que sin Ella es la Nada.
Solo hay que entender.
Y me repito en pensar.
Muy cruda es la soledad
A no perderse en el vicio.
Todo pensar es motivo
Pa seguir en la morada,
Como alma enamorada
De una hermosa mujer,
Que sin Ella es la Nada.
Solo hay que entender.
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Piense paisano a decir
Sólo la vida, vale tener,
El gaucho sabe entender
La Soledad del vivir.
Si piensa un día morir
Que no sea de tristeza,
ayúntese con fiereza
A los brazos de una mujer,
La alegría, con la belleza.
Sólo ahí lo podrá ver.
Sólo la vida, vale tener,
El gaucho sabe entender
La Soledad del vivir.
Si piensa un día morir
Que no sea de tristeza,
ayúntese con fiereza
A los brazos de una mujer,
La alegría, con la belleza.
Sólo ahí lo podrá ver.
Contemplar nuestra pampa
Es mirar nuestra historia,
Es hurgar en la memoria
Recuerdos con enseñanza.
Alambre a la paisanada,
Vaquitas que son ajenas,
El llanto de las abuelas,
El trabajo golondrina
El esfuerzo de mi china
Cuando no hubo galleta.
Mucho sufrió la pobre
Y todo por culpa mia,
Por ella comió la cria
Cuando no hubo ni un cobre.
No he sido un buen hombre
Porque mucho tiempo dudé
Cuando no había pa´ comé
Mucho quedé esperando
El patrón no es paisano
Tarde salió el: ¿por qué?
En alguna triste ocasión
Sin pensar en los mios
Casi a uno amasijo
Cuando le hallé la intención,
Ella dijo: -¡yo soy tu amor!
Cuando me brotó el veneno
Y le salvó el pellejo
A ese gaucho presumido
Con faca le eché el envido
A ese perro sabueso,
Y Sin saber salvó la mía
Porque estaba perdido,
O en cárcel, o podrido
Terminaba la partida.
Yo por Ella daba mi vida
Sin importar los costos,
Soy un gaucho amoroso
Por eso soy gaucho cantor,
Canto mis penas de amor
Canto mi pena pa´los otros.
Con Dios se fue, la bella
Hoy no está conmigo
Sigue siendo Cristo amigo
Por eso sigo la huella.
Aunque busque la cencia
Que Dios no sabe explicar
¿si la muerte es eternida?
¡Pa´ qué querer la vida!
El canto de libertad.
Es una promesa mentida.
cristian
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