sábado, 20 de junio de 2009

Pino Solanas


Ya Maquiavelo lo decía sin vueltas ni rodeos. Entre el ser y el deber ser hay una distancia inmaculada, un camino eterno de buenas intenciones, pero un camino inmanente a la interioridad personal inaplicable a la realidad concreta de la bosta de la política. El “deber ser” es inútil, castra la voluntad (la convierte en buena voluntad) y la determina a principios racionales trascendentes; solamente accesibles a espíritus eternos, a voluntades profundamente motivadas por la bondad o a filántropos panglosianos que sólo ven “mundos posibles”, donde hay bosta y podredumbre. Pino solanas no sólo tiene acceso a estas verdades, sino también viene a ser un Lutero del peronismo. El otro día lo escuché decir que estudió a Perón y “codificó” todo el pensamiento del general. Impresionante, resulta que hoy tenemos un exégeta del general. ¡A la pucha, eso si que es meterse en la bosta de la política!

Pino ha convertido la bosta de la política en un peronismo utópico. Los ladrillos de este nuevo peronismo están hechos con buenas intenciones.

4 comentarios:

CASPA DE MALDITOS dijo...

Pero el camino al infierno está plagado de buenas intenciones.

Goliardo dijo...

Asi decia Freud -segun tengo entendido. Goethe y Hegel deberian decirnos que corno nos`pasa, y tambien don sigmund.

Anónimo dijo...

"Que el Pino no te tape el bosque" (La política no ganó un dirigente, el cine perdió un director)
Pino Solanas se pone del lado de la “ética” y pide por la nacionalización del petróleo, olvidando que el año pasado fue cómplice de la sociedad rural en el conflicto agrario. Contradicciones de centroizquierda.

Pino siempre que hizo política terminó “abandonando” y dejando su barco naufragando en medio del océano. Recordemos cuando se escapó después de poner el huevo de la serpiente de la centroizquierda que luego forma la Alianza con De la Rua.

Pino tarde o temprano se quiebra y se pone a hacer cine, y luego se aburre y vuelve a la política, como Zamora con los libros, ambos representan un desprecio gigante por la militancia y la construcción política.

De vez en cuando Pino se engancha, le agarra una ráfaga de inspiración para ser funcional a la derecha. No entiende lo que pasa en la ciudad de la furia.

Cuando la necesidad de unir al campo popular es urgente para ganarle al macrismo, Solanas se esfuerza en dividir los votos progresistas, haciendo foco en lo que según el, no hizo el kirchnerismo.

Sectores como el de Pino Solanas juegan para los grupos económicos concentrados.
Pino se convirtió en pocos días en la estrella de TN y América 24. Es el nuevo candidato que los medios de comunicación miman para instalar.

Esta ecuación no es en vano, y ensucia al gran cineasta: esta en juego la ley de medios audiovisuales. Pino, siendo tan inteligente, parece no darse por aludido que los multimedios lo están usando para desgastar al gobierno nacional. Primero lo usó la SociedadR, ahora lo usan para parar la ley de medios…
Pino no encuentra el consenso moral de dignidad que tenia con sus películas. La política no ganó un dirigente, el cine perdió un director.

Mauri Kurcbard dijo...

Muy buena la idea de Pino como un Lutero del peronismo.
Saludos
P
V