El amor de una Mujer, el pensamiento de un Filósofo, y el "corazón" de los que "odian"

Evita

Miren que linda estaba evita en esta imagen, y siempre fue mucho mas linda cuando no estaba producida. A veces me pregunto; ¿cómo el odio pudo más que la obra de amor? ¿Cómo un tipo puede escribir "viva el cáncer" en una pared mientras la joven luchadora por la dignidad, se estaba consumiendo por esa triste enfermedad? y cómo el odio llegó mas allá de la muerte, siguió a través de los años, y sigue aun. ¿Qué habrá hecho esta bella mujer para que pueda producir tanto odio y tanto amor en los sectores más humildes del pueblo argentino? ¿Será sólo su proyecto político? ¿O será que la sociedad argentina no estaba preparada para tolerar una “mujer hermosa”, “joven”, “pobre”, “artista”, y “pasional”. Cuando digo “sociedad argentina” incluyo a los sectores humildes y dominantes. Seguramente la oligarquía argentina no estaba preparada para semejante revolución. Ahora ya no me pregunto por el corazón de los que odian, sino por el corazón de los que aman. Los sectores humildes argentino: ¿estaban preparados para asumir el liderazgo de una “mujer” así?

Quizá sea una pregunta que no puedo contestar simplemente, por eso sigamos con el "corazón" de los que “odian”.

Me viene a la memoria la acusación de "blasfemia", y la expulsión de Baruch Spinoza (1632-1677) de la sinagoga; recuerdo esas palabras llenas de odio:

"Excomulgamos, maldecimos y separamos a Baruch d´Epinosa, con el consentimiento de Dios bendito, y con el de toda la comunidad;...maldito sea de dia y de noche; maldito sea al acostarse y cuando se levante; maldito al salir de su casa, y cuando a ella regrese; que Dios no le perdone jamás,; que la airada cólera de Dios se inflame contra tal hombre y le envíe todas las maldiciones que están escritos en el libro de la ley...Nadie tenga trato con él, ni escrito ni hablado; nadie permanezca con él bajo el mismo techado; y nadie lea lo por él escrito"

En el escolio de la proposición XLVI, libro 4 de la Ética, Spinoza dice:

“Quien quiere vengar las ofensas mediante un odio reciproco, sin duda, vive miserablemente. Quien por el contrario, procura vencer el odio con el amor lucha con alegría y confianza, resiste con igual facilidad a muchos hombres que a uno solo, y apenas necesita la ayuda de la fortuna”

Cuanto hay de autobiográfico en esta sentencia, si hasta se puede vislumbrar proféticamente lo que sucederá posteriormente. Una vez fallecido el gran filósofo judío, el cuerpo de Spinoza al igual que Evita, fue profanado y maldecido –seguramente. Que capo un tipo que argumenta geométricamente una sentencia así:

“Un hombre libre en nada piensa menos que en la muerte, y su sabiduría no es una meditación sobre la muerte, sino de la vida”

Espinosa, Ética demostrada según el orden geométrico, traducción Vidal Peña.
Spinoza, Tratado teológico-político, traducción Vargas y Zozaya.

http://www.youtube.com/watch?v=upsF0jpz4kg&feature=related