sábado, 1 de diciembre de 2012

Obama, el feminismo negro y la yapa


Parece normal, y es bueno que así sea. Ayer Chile, hoy Argentina y Brasil, tiene mujeres presidentas. Ayer nomás, Barak Obama obtenía su presidencia en una reelección. Barak Obama, el primer presidente negro de EEUU. No ha sido fácil para un negro ser presidente norteamericano. Tuvieron que suceder un par de cosas, principalmente (por lo menos desde este humilde enfoque) aquello que Hegel retrataba desde las expresiones literarias, en la época clásica: es decir, La Epopeya, La Tragedia y La Comedia. Estos pasos on fenómenos que la conciencia de un pueblo debe procesar para poder desde la distancia mirar en su totalidad. Veamos como ha llegado a superarse (en sentido hegeliano, claro) esta tríada dialéctica desde una mirada sobre los clásicos del cine.


1- La Epopeya: Lo que el viento se llevó (1939)


Todos hemos visto el clásico del cine universal. Lo que el viento se llevó relata la vida de la Señorita Escarlata (Vivien Leigh), un joven bella, niña malcriada y de temibles ojos azules. Su sirvienta Mammy (la actriz y cantante Hattie McDaniel, primera mujer negra en ganar un Oscar) le decia cariñosamente “¡Señorita Scalata, Señorita Scalata!”. La película tiene el tono épico (desde la mirada del sur esclavista, los yanquis del norte tienen su propia historia) de aquel tiempo donde amos y criados, blancos y negros compartían la pasividad y la tradición del sur estadounidense. La señorita Escarlata había perdido todo después de la guerra de secesión norteamericana. El norte había arrasado con el sur. La guerra se llevó la tradición que el sur tanto anhelaba. Por eso, lo que el viento se llevo. En el plano netamente racial, el sur presenta esa unidad sustancial entre desiguales, es decir, blancos y negros. Lo que el viento no pudo arrasar es el racismo, que tiempo después se institucionalizó en una legislación segregacionista, las denominadas leyes Jim Crow. Tenemos un valioso testimonio de Simone de Beauvoir sobre la situación de los negros del sur en EEUU en su viaje de 1947.
“Se dice «Los negros son sucios». Esto trasluce la ambivalencia de las opiniones de los sudistas con respecto a los negros, pero comen sin remilgos los alimentos que sus manos han preparado; les confían a sus hijos, el cuidado de sus casas” (Simone de Beauvoir, América día a día, 1999: 250)
(Es recomendadísimo aquel testimonio de Simone de Beauvoir. Para aquellos estudiosos del feminismo y de origen del pensamiento de la otredad en El Segundo sexo, es recomendable ese testimonio de la filósofa.). Pasemos a la consecuencia de esta unidad desigual, La Tragedia.

2- La Tragedia: El color Púrpura (1985)


La película de Steven Spielberg desarrolla la vida de Celie, una joven muchacha negra del sur de EEUU. Celia es violada por su padre (un hombre negro) y posteriormente es separada de su hermana. Celia es vendida a un hombre que la somete a la servidumbre extrema. Celia, una mujer negra del sur de EEUU, que como dice la destacada bell hooks, una militante del feminismo negro, sin otro a quien “oprimir”:

“La mujeres negras sin un «otro» institucionalizado al que puedan discriminar, explotar u oprimir tienen una expectativa vivida que reta directamente la estructura social de la clase dominante racista, clasista y sexista. (bell hooks, Mujeres negras. Dar forma a la teoría feminista, 2004: 49)
Una mujer negra, pobre, lesbiana del sur no tiene otro. Es una mujer subalterna, una otra de la otra. La unidad sustancial, es decir, hombres blancos, hombres negros, mujeres blancas y mujeres negras, que en Lo que el viento se llevó, peleaban por un destino comun, se desdobla en la diferencia. Aparece la sociedad legal segregacionista con las denominadas leyes Jim Crow. Siguiendo a Simone de Beauvoir,
“La altanera nación americana... obliga al negro a limpiarle los zapatos y demuestra en seguida su inferioridad física y mental mediante el hecho mismo de que es un limpiabotas”. (Simone de Beauvoir, América día a día, 1999: 252)
El problema de los negros, es el problema de los blancos. El otro es el producto de si. El ejemplo trágico, es la real vida de las mujeres negras del sur de EEUU. Aquí aparecen las mujeres negras, sirvientas de mujeres blancas y sirvientas de los hombres negros, es decir, sus opresores patriarcales. Se radicaliza la diferencia.

Otras expresiones de esta radicalización de la diferencia pertenecen a la serie Raíces, al movimiento Panteras Negras y el surgimiento del feminismo negro como respuesta al universalismo abstracto del feminismo liberal de Betty Friedan. Pasemos a la "síntesis".

3- La Comedia o Vidas Cruzadas (traducción al español de The Help de 2011)



En 2009 llega a la presidencia de los Estados Unidos el primer hombre negro, Barak Obama. Se cierra la primera tríada dialéctica del racismo en EEUU. Esto no significa que se eliminó el racismo, simplemente, después de llegada una instancia, se puede mirar la totalidad desde la distancia necesaria como para tener presente algunos aspectos. Como sostiene Hegel, cuando la historia pinta con grises sobre tonos grises, significa que una forma de vida ha envejecido. Este envejecimiento, en el plano estético de la literatura y el cine, refleja una vida que ya no es. La distancia permite mirar distinto, sin estar encima de la cosa. La distancia permite otra mirada.

Un ejemplo de esto que digo, es la película The Help de 2011. Esta película es una comedia, que sin llegar a ser una satira, ni mucho menos refleja la vida de las mujeres negras del sur de EEUU que cuidan a niños blancos, que tiempo después serán sus patrones. La película tiene escenas fuertes sobre la situacon de las mujeres negras. Pero también, tiene una mirada burlona sobre aspectos de la vida de amas y sirvientas. Esto se puede hacer porque algunas cuestiones ya fueron superadas (en sentido hegeliano, repito).

Conclusión

El ejemplo de esta superación dialéctica de una epopeya-tragedia, en Argentina es el humor de Capusoto. Desde una estética burlona, pero sin perder la reflexión sobre los 70, Capusoto repasa una historia que por muchos años fue vista con el rotulo “violencia política” o setentismo.

Si se puede ironizar sobre una época trágica es porque hay distancia.

PD

Desde este humilde espacio, proponemos que Obama tenga su bombita Rogriguez. Ahí va un buen modelo.



1 comentario:

Charlie Boyle dijo...

Tal vez de lo que se trate es de superar una dialéctica y avanzar sobre la anamnesis http://carlosboyle.blogspot.com.ar/2012/12/dialectica-del-desaparecido-anamniesis-2.html