martes, 4 de agosto de 2009

Soy un degenerado neo-marxista


“El amante es el pretendiente y el amado es el pretendido, la disimetría es latente, la confrontación es evidente. Pero la erótica platónica invita a ambos al conocimiento de la belleza en si. Diotima había iniciado a Sócrates en los “ritos de iniciación”, y había explicado al joven filósofo a dirigirse a los cuerpos bellos, y en ellos, engendrar buenos razonamientos. Los razonamientos en el cuerpo de los amados ya no son pasivos, tienen la iniciación en la búsqueda de la verdad. En este momento es cuando un amado deviene en amante, y el amante en amado. Es al caso de de Alcibíades que ve a Sócrates como objeto de deseo, y Sócrates en la postura de amado, se siente cortejado por el amante. El amado no lo rechaza, pero no cede, y eso lo hace más deseable. Pero a diferencia del amado joven que no cedía por dignidad, Sócrates no cede por sabiduría. Esta actitud en Sócrates es lo que lo hace decir a Alcibíades que ve en el filósofo a un sofista y sátiro. El elogio de Alcibíades es consistente con la descripción que hace Diotima de Eros. La doble naturaleza de Sócrates es lo que atrae. Los amantes desean la parte amante del amado, su deseo, su amor a la sabiduría. Y esto es lo que quiere enseñar Sócrates en clave de cortejo. Cada amante tiene su parte de amado. Cada ser tiene la presencia y la ausencia, el recurso y la pobreza y es el movimiento de Eros la mediación entre esta dualidad. Convertir el deseo en desear el deseo, y no como confunde Alcibíades en cambiar “oro por bronce”.”

Esto es un fragmento de un parcial de filosofía sobre “El banquete” de Platón. El trabajo se llama “La Dialéctica del amante y del amado”, y desarrolla la relación “conflictiva” (según la interpretación de Foucault) entre Alcibíades y Sócrates. Ahora me doy cuenta que soy un hereje neomarxista. No sabía que era un degenerado, caray…..

1 comentario:

Anónimo dijo...

hereje montonero Goliardo va a ser excomulgado por tanto renuncie primero!!!
que lindo pasaje!!!
cariños mery!!