domingo, 17 de octubre de 2010

Cooke, teólogo de la política


Una posible explicación al concepto “hecho maldito del país burgués” podría ser; relacionar el concepto teológico-político de Estado de excepción en Carl Schmitt.

Desde teorías aberrantes al estilo Germani se pensó al populismo-peronismo como variables confluentes en un mismo espacio.

La temprana democratización institucional y la “manipulación” de grupos de poder en una falsa integración entre elementos tradicionales y modernos.

Desde dichas teorías -con grandes dificultades para explicar el conflicto-, se interpretó al peronismo como el interruptor maligno de cierta regularidad. Ahí convivían nacionalistas, católicos, marxistas conversos, sindicalistas, mujeres y hombres, etc.

El peronismo vendría a ser una bolsa de papas. Solo se puede mal-entender peronismo desde una teología del buen milagro.

Recordemos que el concepto de “milagro" en términos jurídicos tiene estatus de “estado de excepción” en la obra de Carl Schmitt.

Solo el milagro de un genio maligno puede producir al peronismo.

Dios elige –solo- en el mejor de los mundos posibles.

(Pequeño apunte sobre el peronismo surgido de una laxa, heterogénea y poco exigente interpretación de Descartes, Leibniz, Laclau, Cooke y Carl Schmitt)

2 comentarios:

nanolefou dijo...

Mirá lo que se me ocurrió:

"El peronismo fue el movimiento que surgió y triunfó frente a todos los partidos, que hizo saltar el esquema de los partidos repartíendose el poder politico. No es que la izquierda hizo crisis, es que un pedazo de la superestructura del imperialismo salto junto con los demás pedazos de la misma. El movimiento popular que atacó a la oligarquía y al imperialismo y paso a ser la izquierda... Fue una situción revolucionaria donde los esquemas teoricos no servían. Faltaba una izquierda nacional y ese papel paso a ocuparlo el peronismo, sin definirse como tal."



PD: no es necesario aclarar que es de John W.

Goliardo dijo...

Desde algunos marcos teóricos -funcionalistas- solo se explica al peronismo en términos teólogicos. Como "algo" externo que irrumpe a la causalidad natural. Los franciscanos empiristas medievales explicaban el milagro como la interrupcion de la naturaleza por parte de , claro, dios. En ese sentido Carl Schmitt interpreta el etado de excepcion, como ruptura de un orden legal.

saludos